COMO ELEGIR UN BUEN ALCALDE EN ASIA
No deberíamos desperdiciar nuestro interés en candidatos que no puedan demostrar ninguna capacidad de gestión edilicia. Quienes basen su campaña sólo en dádivas y tandas publicitarias tratando de parecer “buenas personas” nunca serán capaces de resolver los problemas globales de la comuna ni las necesidades particulares de los ciudadanos Asianos.
Aunque nadie lo reconozca, los agente políticos están preparando sus herramientas electorales para el proceso de selección 2011, donde los representantes que conformarán el Concejo Municipal: alcalde o alcaldesa y concejales. Como ciudadanos responsables, debemos estar conscientes de la capacidad de gestión de los candidatos, porque esto es un indicador clave de la calidad de la gestión municipal si resultan elegidos. Es decir, un buen gestor probablemente será un buen representante, pero un mal gestor nunca será buen representante.
Todas las actividades comunitarias y empresariales destinadas a alcanzar un objetivo dado, utilizan una variedad de recursos tales como personas, financiamiento, materiales, tiempo y conocimiento. Nosotros, como simples ciudadanos o consumidores, siempre estamos conscientes de la estrategia y procedimientos que siguen los directivos para administrar eficientemente los recursos y acercarse al cumplimiento de los objetivos.
Pero… en el caso de alcaldes ¿Quién es un buen candidato?
Respuesta: Deberemos estar atentos a identificar a los candidatos que poseen los siguientes atributos:
1. Una visión global de la comuna y conocimiento de los mecanismos legales y reglamentarios de solución de sus problemas, además de creatividad para aprovechar las oportunidades de desarrollo que se presenten.
2. Cercanía con la gente y capacidad de comunicarse afectivamente, demostrable con una limpia trayectoria de servicio público y con la leal adhesión de un equipo de trabajo.
3. Capacidad para obtener y administrar recursos eficientemente durante su campaña; en particular, de obtener fondos y respaldo desinteresado de muchos colaboradores.
4. Una definición precisa de sus electores meta, porque ningún candidato puede pretender darle el gusto a todos.
5. Capacidad legal y técnica para redistribuir recursos y focalizarlos en los problemas más graves de la comuna: desigualdad social, desempleo, delincuencia,
violencia intrafamiliar, marginalidad rural, estacionalidad de la economía, etc.
6. Propuestas programáticas viables y con financiamiento responsable y sustentable en el tiempo.
En conclusión: No deberíamos desperdiciar nuestro interés en candidatos que no puedan demostrar ninguna capacidad de gestión edilicia. Quienes basen su campaña sólo en dádivas y tandas publicitarias tratando de parecer “buenas personas” nunca serán capaces de resolver los problemas globales de la comuna ni las necesidades particulares de los ciudadanos.
Aunque nadie lo reconozca, los agente políticos están preparando sus herramientas electorales para el proceso de selección 2011, donde los representantes que conformarán el Concejo Municipal: alcalde o alcaldesa y concejales. Como ciudadanos responsables, debemos estar conscientes de la capacidad de gestión de los candidatos, porque esto es un indicador clave de la calidad de la gestión municipal si resultan elegidos. Es decir, un buen gestor probablemente será un buen representante, pero un mal gestor nunca será buen representante.
Todas las actividades comunitarias y empresariales destinadas a alcanzar un objetivo dado, utilizan una variedad de recursos tales como personas, financiamiento, materiales, tiempo y conocimiento. Nosotros, como simples ciudadanos o consumidores, siempre estamos conscientes de la estrategia y procedimientos que siguen los directivos para administrar eficientemente los recursos y acercarse al cumplimiento de los objetivos.
Pero… en el caso de alcaldes ¿Quién es un buen candidato?
Respuesta: Deberemos estar atentos a identificar a los candidatos que poseen los siguientes atributos:
1. Una visión global de la comuna y conocimiento de los mecanismos legales y reglamentarios de solución de sus problemas, además de creatividad para aprovechar las oportunidades de desarrollo que se presenten.
2. Cercanía con la gente y capacidad de comunicarse afectivamente, demostrable con una limpia trayectoria de servicio público y con la leal adhesión de un equipo de trabajo.
3. Capacidad para obtener y administrar recursos eficientemente durante su campaña; en particular, de obtener fondos y respaldo desinteresado de muchos colaboradores.
4. Una definición precisa de sus electores meta, porque ningún candidato puede pretender darle el gusto a todos.
5. Capacidad legal y técnica para redistribuir recursos y focalizarlos en los problemas más graves de la comuna: desigualdad social, desempleo, delincuencia,
violencia intrafamiliar, marginalidad rural, estacionalidad de la economía, etc.
6. Propuestas programáticas viables y con financiamiento responsable y sustentable en el tiempo.
En conclusión: No deberíamos desperdiciar nuestro interés en candidatos que no puedan demostrar ninguna capacidad de gestión edilicia. Quienes basen su campaña sólo en dádivas y tandas publicitarias tratando de parecer “buenas personas” nunca serán capaces de resolver los problemas globales de la comuna ni las necesidades particulares de los ciudadanos.
Post a Comment